La región de Aysén, ha sido de preferencia una zona netamente ganadera, iniciando, en algunos sectores y zonas bien definidas importantes esfuerzos por reconvertir los rubros tradicionales, a la producción de nuevos rubros, en los cuales se tienen importantes ventajas comparativas como región. Dentro de estos nuevos rubros agrícolas, se cuenta el cultivo del cerezo, producción de semillas de hortalizas y frutales menores, como la frutilla, zarzaparrilla, grosella y recientemente ha desesperado el interés por el cultivo del arándano. Según estudios preliminares realizados por el INIA Tamel Aike, la zona húmeda de la región de Aysén, presenta condiciones adecuadas de suelo y clima, para desarrollar comercialmente el arándano. El objetivo principal del proyecto es evaluar cultivares tardíos de arándano en la región de Aysén, para prolongar la oferta de fruta fresca al Hemisferio Norte. Para cumplir con esto se contempla evaluar cultivares de arándano en 3 zonas edafoclimáticas (Zona Intermedia, Zona Microclima y Zona Húmeda). El proyecto se orienta hacia la expansión y consolidación del rubro frutícola en la región y específicamente del cultivo del arándano, como rubro de ventajas comparativas, técnicas y económicas, que permitirán explorar eficientemente el mercado de exportación de fruta fresca.