La región del Biobío presenta más de un 95% de la variedad moscatel de Alejandría del país, la cual se emplea principalmente para vinificación de vinos granel, lo que conlleva un bajo precio por la venta de la uva, que en algunas ocasiones no alcanza a cubrir los costos de producción. Como consecuencia se han abandonado algunos viñedos o se han arrancado, transformando los suelos agrícolas en una producción forestal, lo cual produce la disminución de su valor comercial. La variedad moscatel de Alejandría, conocida en la zona como uva Italia, es una cepa multipropósito que se emplea para vinificación, consumo fresco o pasas y grapas o aguardientes. El vino moscatel de Alejandría presenta características distintivas debido a la presencia de terpenos en las bayas que contribuyen a su gusto moscatelizado. Mediante esta variedad, considerando sus características de madurez, se pueden obtener vinos aromáticos secos y dulces, de acuerdo al proceso de elaboración.