Existen variadas técnicas y tecnologías para establecer los requerimientos de agua de parte de las plantas, pero la evaluación objetiva de ellos no es una práctica común en la agricultura nacional ya que las herramientas disponibles que apoyan la toma de decisión son usadas, principalmente, por grandes empresas agrícolas pero que están lejos del alcance de los productores pequeños y medianos (85% de agricultura chilena) debido al costo y, en muchos casos, la necesidad de conocimientos para interpretar de correctamente la información. El uso oportuno del agua de riego en cantidad y tiempo de aplicación es de suma importancia ya que es un recurso determinante en la cantidad y calidad de cosecha a obtener, pudiendo mejorar hasta en un 20% el rendimiento de una especie con una buena práctica y oportunidad de riego. Además, este recurso se ha tornado crítico debido a las altas temperaturas de verano y a una disponibilidad restringida producto del cambio climático y la alta competencia por él de parte de otras industrias.