Existe la oportunidad de desarrollar un mercado innovador en torno a la demanda por alimentos fermentados, una de las principales tendencias alimentarias a nivel mundial. En el caso de las bebidas, se impone un nuevo tipo de consumidor que busca compatibilizar el consumo social de alcohol sin descuidar la salud, surgiendo nuevos productos con menos o sin alcohol (low or not), elaborados de distintas frutas, en formatos prácticos/ atractivos y producidos de forma sustentable. Además, existe el problema generado por el alto volumen de cereza que no exportada y que excede la demanda interna, generando RISES (packing y huerto), desplome de precios internos, afectando rentabilidad de pequeños productores. Partimos el 2018, haciendo un ’match’ entre la oportunidad en torno a las bebidas fermentadas y el problema de sobreproducción de cerezas, creando una solución innovadora: desarrollo de bebidas fermentadas de cerezas, de tendencia, exportables y con producción sostenible. Hoy contamos con fermentados de cerezas únicos en el hemisferio sur testeados técnica y comercialmente. Nos ubicamos en el Valle de Curicó, que ofrece condiciones óptimas para nuestro escalamiento: alta disponibilidad de materia prima a bajo costo y capacidad de proceso, servicios e insumos asociados a la vitivinicultura, a precios competitivos.