2024-05-062024-05-062021https://bibliotecadigital.fia.cl/handle/20.500.11944/148827El problema actual que se busca resolver es el descentralizar la producción de material vegetal clonal que se genera en Chile, produciéndose un delay productivo al no tener stock, donde viveros y laboratorios programan entregas de plantas para un promedio de 2 años, con este proyecto en la región de La Araucanía, tendríamos una producción dimensionada de 500.000 plantas anuales, ofreciendo un material clonal, sanitizado y aclimatado. Esto también aprovechando el auge que ha vivido la fruticultura en nuestra región donde según el último catastro frutícola Odepa-Ciren, al año 2019, La Araucanía alcanzó una superficie frutícola de 14.400 hectáreas, con 548 huertos frutales, siendo la sexta a nivel nacional en cuanto a producción en este rubro, con un crecimiento sostenido año a año que, al 2021 pueden llegar a las 20 mil hectáreas, donde se abre una tremenda oportunidad de poder comercializar lo producido a este creciente mercado potencial sobre todo en el cultivo de cerezas que se ha convertido en uno de los más importantes productos de exportación frutícola de nuestra región, la superficie regional se ha quintuplicado los últimos 10 años y según el catastro frutícola de 2019, en La Araucanía hay 1.170,28 ha de cerezo, de éstas, 971,58 se encuentran en la provincia de Malleco y 198,70 en Cautín. Es por esto que la solución a desarrollar es producir plantas in vitro, en un sistema estéril, donde se manejen todas las variables de producción, desde los sustratos que se elige para estimular el crecimiento, la temperatura y fotoperiodo al que se exponen. Con esto se escapa y diferencia de la manera tradicional en la que los viveros trabajan hoy en día, con procesos antiguos de producción, ligados a un resultado poco uniforme, con resultados de escasa sanidad, los cuales repercuten en la producción final de los huertos y en la vida útil de estos. El atributo diferenciador de la propuesta seria incorporar una línea de trabajo del laboratorio, desde la producción de las portas injertos, pasando por el vivero donde se injertarían con material seleccionado por años. Si bien existen más laboratorios en la zona norte y muy pocos en la zona sur, ninguno es viverista, productor y exportador de fruta, lo que posicionaría a este proyecto y daría como un atributo diferenciador, en como guiar y avanzar con el proyecto, siguiendo las directrices de los mercados externos y llevarlos a la real necesidad de la gente, produciendo lo que realmente se necesita al momento de hablar de fruta de calidad. Nuestros potenciales clientes o mercado se enmarcan a los productores de la región de La Araucanía y regiones vecinas, los/as cuales se estiman que pueden alcanzar aproximadamente más de 1000 productores (Tales como grandes productores y pequeños emprendimientos en las zonas de interés). El mercado objetivo en primera instancia se abarcará entre la región de la Araucanía y regiones vecinas, como la de la región del Biobío y Los Ríos, esto según el catastro frutícola del informe de a ODEPA 2019, estos/as actualmente obtendrán plantas aclimatadas libres de enfermedad y de óptima calidad, asegurando su trazabilidad y disponibilidad en la zona, esto favorece al aumento de la superficie de reconversión frutícola de la región.Volumen 1. Propuesta -- Volumen 2. Plan Operativo -- Volumen 3. Informe Técnico Final.MICROPROPAGACIÓNESPECIES FRUTALESFRUTICULTURAPRODUCCIÓNVIVEROSMERCADOSLaboratorio de micropropagación de especies frutales de interés económico para la zona surProyectos