¿Cuál es el problema que se quiere resolver? La producción intensiva bajo invernadero y frutales menores en la zona de Angol - Renaico se ha constituido en una importante actividad comercial en la pequeña agricultura de la zona desde cinco años a la fecha, centrándose en la producción de una gama de especies hortícolas de hoja, fruto y berries de exportación. En dicho proceso tecnológico -productivo se emplea una amplia batería de insumos agroquímicos y fertilizantes sintéticos que tienen un negativo impacto en el medio ambiente y sobre la salud directa de los propios productores que son los encargados de ejecutar las faenas agrícolas al interior de sus unidades prediales y finalmente de los consumidores. Los altos costos asociados a salud de las personas y del agroecosistema generados por esta agricultura química bajo el uso indiscriminado de estos agentes ha llevado a despertar una conciencia en los agricultores en que se debe cambiar el sistema productivo convencional utilizado por la incorporación de nuevas tecnologías más amigables con su salud y la del medio ambiente. La falta de conocimientos técnicos especializados en agricultura orgánica, la inseguridad de los consumidores que los productos puestos en el mercado provengan de procesos 100% orgánicos, el no lograr producir volúmenes que demandan los mercados y el costo anual que genera la certificación, hacen que esta conversión no haya sido posible hasta el momento.