El riego es un factor imprescindible para un cultivo y su escasez o exceso afectan directamente el rendimiento de un predio. Así, el uso de este recurso debe ser oportuno, eficiente y suficiente, lo que generalmente no ocurre como consecuencia de factores como: > falta de aplicación de labores adecuadas en el campo, > mala gestión de la información, > toma de decisiones desinformadas aunque exista información, > bajo nivel educacional de los operadores de riego, quienes no comprenden la información de sensores y estaciones meteorológicas.