Al momento de efectuarse este proyecto, no se disponía en el país de un documento dirigido hacia los productores con todas las variables que intervienen en el monitoreo de plagas y enemigos naturales para las diversas especies. En consecuencia, la información relacionada con este tema se encontraba disgregada en varias fuentes o bien estaba enfocada desde un punto de vista netamente entomológico, sin una interpretación adecuada al lenguaje del productor. Por esta razón, no se estaba llevando a cabo el monitoreo necesario para determinar la real conveniencia de efectuar aplicaciones de productos fitosanitarios o bien focalizarlas en aquellas zonas del huerto o del potrero realmente afectadas. Incluso, por la falta de información sobre estos temas, muchas aplicaciones continuaban efectuándose sobre la base de fechas calendario. Por otra parte, y debido a la falta de esta información, los productores no habían podido llevar registros relacionados con el monitoreo de plagas y organismos benéficos, lo que es uno de los requisitos fundamentales de los mercados extranjeros. Por esta razón, el presente proyecto se orientó a generar herramientas básicas para la identificación de plagas y organismos benéficos para uso en terreno por parte de los productores, de manera de contribuir a superar la situación antes descrita. Para ello, se realizó una selección de las principales plagas que afectan en Chile a los cultivos de pomáceas, carozos, uva de mesa, palto, tomate y cebolla. Para cada plaga se realizó una búsqueda de referencias para determinar condiciones y metodologías de monitoreo y los aspectos biológicos de cada una. Se desarrollaron actividades en terreno orientadas a la búsqueda de los diferentes estados de la plaga, sus enemigos naturales y el daño que producen en los cultivos, para la producción fotográfica. Además, se tomaron muestras que fueron llevadas a los laboratorios de la FDF, donde se fotografiaron bajo la lupa estereoscópica o microscopio óptico. De este material se seleccionó el más adecuado para ser incluido en las guías de monitoreo, considerando la naturalidad de las imágenes y el hecho de que mostraran lo que normalmente se puede observar en terreno. Respecto del desarrollo del material, para cada plaga se realizó una ficha con sus antecedentes biológicos, denominada Conocimientos de la Plaga y sus enemigos naturales. En este capítulo se incluyeron: nombre común, nombre científico, descripción, daño, ciclo y desarrollo en la temporada, y enemigos naturales a incluir en el monitoreo y su reconocimiento. Para cada plaga se desarrolló un segundo capítulo denominado Guía de Monitoreo y Control, que incluyó: objetivo a monitorear, estructuras donde monitorear, tamaño y ubicación de la muestra, cómo monitorear, época y frecuencia de monitoreo, resultados cuantitativos del monitoreo y criterios para la decisión de control.